Los flujos de Inversión Extranjera Directa productiva recibidos por España han alcanzado su máximo histórico en 2018, tanto en términos brutos como netos, culminando una serie ascendente iniciada en 2013. Esta positiva evolución contrasta con la tendencia a nivel global, en la que se viene observando una fuerte reducción de los flujos desde 2015, lo que ha contribuido a situar a España entre los principales receptores de inversión a nivel mundial en el año, sexta según los datos adelantados por la UNCTAD.
Madrid, destino de más del 85% de la inversión recibida en España este último año y del 57% desde 2013 según los datos del Registro de inversiones, ha sido la gran protagonista y responsable de buena parte de los registros nacionales. La región encadena cinco años consecutivos por encima de los 10.000 millones de euros recibidos, su media histórica desde 1993, ascendiendo las inversiones registradas este último año hasta los 39.925 millones, récord histórico, tras un incremento anual superior al 125%.
¿Qué hay detrás de estas cifras?
Volatilidad de las cifras
Las series de inversión extranjera tienden a ser muy volátiles: unas pocas operaciones de gran escala pueden tener un impacto significativo sobre los resultados anuales, tanto a nivel nacional como regional. Esto es especialmente cierto en el caso de Madrid, ya que al ser la capital sede de muchas de las principales empresas nacionales, cualquier operación corporativa sobre ellas de cierta escala impactará de forma notable en las cifras globales de inversión.
Si se analiza la serie histórica, todos los años en los que se han superado los 15.000 millones de inversión han sido testigos de operaciones corporativas transnacionales de gran escala. Así, las operaciones corporativas en el sector de las telecomunicaciones en los años 2000 y 2011, las adquisiciones en el sector energético y en el del tabaco en 2007 y 2008, o la operación en el sector aeroespacial también en 2011 se han visto reflejadas en los máximos alcanzados dichos años. 2018 no ha sido una excepción, y parte del imponente registro anual se debe a una operación concreta en el sector del transporte y almacenamiento. No obstante, incluso sin contabilizar dicha operación, el registro anual en 2018 en Madrid seguiría estando en niveles de récord histórico, más que duplicando las cifras medias mencionadas.
Capitalidad y efecto sede
También suele resultar habitual aducir un cierto efecto metodológico, referido como ‘efecto sede’, para explicar que Madrid haya sido la principal receptora de flujos todos y cada uno de los años desde 1993, salvo 2010. Si bien es cierto que dicho efecto existe, y que el Registro de Inversiones asigna aquellas inversiones en las que la empresa no indica dónde se van a ejecutar éstas de forma efectiva al domicilio de su filial en el país, la distribución por la geografía española de dichas filiales no explicaría por sí sola la gran diferencia entre Madrid y el resto de comunidades. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística al respecto, Madrid acoge a cerca de un 38% de las 11.880 filiales de empresas extranjeras existentes en España, frente a un 32% de Cataluña, siendo la diferencia en número mucho menor que la que se aprecia en cuanto a flujos de inversión, stock, empleo ligado a filiales extranjeras, cifra de negocios o valor añadido, por ejemplo. Las razones parecen estar más ligadas pues al tamaño y actividad de dichas filiales, ya que sí se observa una fuerte concentración del stock de inversión y del empleo en un número relativamente reducido de grandes empresas.
En cualquier caso, y a la vista de los traslados de sedes que se han producido en los últimos años hacia Madrid, es de esperar que este efecto se acentúe, en combinación con el de las grandes operaciones (el caso de Abertis, responsable de la mencionada gran adquisición transfronteriza de 2018, sería un caso paradigmático).
¿De dónde proviene la inversión que recala en Madrid?
Madrid recibe flujos de inversión productiva fundamentalmente de otros países de la OCDE. Dentro de ellos, sus socios europeos siguen siendo la principal fuente, siendo los países de la UE-15 responsables de un 74% de los flujos totales desde comienzos de siglo. Entre los países extra-comunitarios, únicamente Estados Unidos (segundo), Emiratos Árabes (noveno) y México (décimo) figuran entre los principales inversores en Madrid desde el año 2000.
En 2018, año muy marcado por las inversiones circulares (inversiones en España de filiales de empresas españolas en el exterior, ligadas a la operación de ACS sobre Abertis a través de su filial alemana Hochtief), una decena de países ha superado los 1.000 millones de inversión en la comunidad, mostrando una sana diversificación geográfica. Estados Unidos ha marcado su récord histórico de inversión (7.267 millones, un 18,2% del total recibido por Madrid, gracias a fuertes inversiones en Promoción inmobiliaria, Intermediación monetaria y Seguros, pero con una fuerte diversificación sectorial), seguido por Reino Unido (2.312 millones, también muy repartidos, aunque destacan Producción de energía eléctrica y Telecomunicaciones por cable), Australia (2.142, concentrados en Construcción de carreteras y autopistas), Italia (1.855, con un gran peso de Telecomunicaciones), Alemania (1.468), Canadá (1.226, prácticamente todos ellos en Suministro de energía), China (1.132, también ligados a Energía, en operaciones gestionadas desde Hong Kong) y Qatar (1.035, en Comercio al por menor en establecimientos no especializados).
Son significativas también las inversiones en 2018 de otros países como Luxemburgo y los Países Bajos, que suelen situarse siempre entre los principales inversores en España y Madrid gracias a las condiciones que ofrecen a las grandes multinacionales para instalar en ellos sus sedes operativas en Europa, rol que se aprecia claramente al observar el último país por el que transitan las inversiones antes de llegar a Madrid. Si se atiende a dicho país inmediato, Luxemburgo y los Países Bajos ocuparían la segunda y tercera posición inversora en cuanto a flujos emitidos en 2018 hacia Madrid, respectivamente, por detrás de Alemania.
Aunque no llegan a situarse entre los diez principales inversores, son significativos los incrementos de inversión de países asiáticos como Japón (814 millones en 2018) y Hong Kong (568 millones), ambas marcando sendos récords históricos. Por el contrario, se echa de menos entre los principales inversores a economías de América Latina tradicionalmente más activas, figurando únicamente México en el puesto 18 y Uruguay en el 21.
Con estas cifras, Madrid acapara más del 90% de la inversión en el año en España proveniente de países como Estados Unidos, Australia, Canadá, China, Qatar, Japón, Hong Kong o Irlanda, estando la inversión proveniente de Francia, Italia o Reino Unido más repartida por la geografía española.
Análisis sectorial
En línea con las tendencias de terciarización de las grandes áreas metropolitanas, el sector Servicios ha sido el que tradicionalmente ha acaparado el grueso de la inversión extranjera recibida por Madrid. Desde 1993 ha concentrado cifras superiores al 67% de los flujos recibidos, porcentaje que asciende al 72% del total en el último ciclo (2013-2018). Los sectores industriales, por su parte, han ido perdiendo protagonismo (del 25% en todo el registro histórico al 14% de las inversiones recibidas desde 2013), mientras que la construcción se mantiene alrededor del 11%.
Al igual que sucedía en cuanto a su origen geográfico, también se aprecia una amplia distribución de las inversiones recibidas por Madrid en 2018 a nivel sectorial. Cerca de una decena de sectores superan los 1.000 millones de euros de inversión en el año, encabezados por las mencionadas inversiones en Transporte y almacenamiento, que concentran el 37% del total de flujos productivos recibidos, prácticamente todos ellos en Almacenamiento y actividades anexas al transporte. El sector de la Construcción se sitúa en segundo lugar (14,9% del total, con fuerte representación tanto de Construcción de edificios como de Ingeniería civil), seguido por Suministro de energía (9,4%), Información y comunicaciones (9,4%, fundamentalmente Telecomunicaciones y Actividades cinematográficas y de producción) y Comercio mayor y menor (6,8%). Superan también esos 1.000 millones de inversión Actividades inmobiliarias, Actividades financieras y de seguros e Industria manufacturera. Hasta otros 12 sectores superan los 200 millones de inversión en el año. Madrid es el destino de más del 80% de los flujos recibidos por España en el año en 34 sectores.
Conclusiones
Como ya se había puesto de manifiesto en entradas previas, Madrid presenta un alto dinamismo en cuanto a su capacidad de atraer inversión extranjera productiva, liderando prácticamente todas las variables relacionadas con la IED en España. Si bien las perspectivas para 2019 son positivas, las dudas sobre el crecimiento económico mundial, la intensificación de las tensiones comerciales y su potencial impacto en la configuración de las cadenas de valor globales, o el endurecimiento de las condiciones de acceso a los mercados financieros pueden limitar la llegada de flujos en los próximos años. Además, de no producirse una operación corporativa de la escala de la registrada en 2018, lo normal es esperar que las cifras en 2019 sigan la tendencia positiva iniciada en 2013, excluyendo el impacto de estas grandes operaciones.
Información adicional
Si desea saber más sobre la inversión extranjera en Madrid, le recomendamos consultar los siguientes artículos y monográficos:
La Inversión Extranjera Directa en Madrid, Barómetro de Economía de la ciudad de Madrid 52